CAMPAÑA SUCIA

La Matanza se pone picante: graves amenazas a militantes del PRO

Miercoles, 02 de Noviembre del 2022 - 08:13 hs.

Sucedió ayer, en las intersección de General Acha y Almirante Brown, Ramos Mejía. Un grupo de personas afines al PRO fue increpado mientras intentaba desplegar una mesa de difusión de la campaña de apoyo al proyecto legislativo del diputado Alejandro Finocchiaro, en busca de declarar a la educación como servicio estratégico esencial. 

Un hombre -que llegó a la esquina a bordo de un Peugeot 408 blanco con patente MOJ605 cuyo titular es Federico Gastón Scordamaglia- además de transmitir con precisión los movimientos del grupo, al que indudablemente vigilaba, profirió amenazas en busca de impedir nuevas presencias en la zona. 

“Lamentablemente, esto no es nuevo -reconoció Finocchiaro-. Es algo que nos sucede también en otros lugares de La Matanza. ¿Cuál es el disparador? Estar en la calle, dialogar con vecinos, sumar voluntades para cambiar de una buena vez a un distrito intencionalmente postergado por los que se sienten dueños del lugar”. 

El legislador y referente del espacio consideró que “no hay democracia si la palabra no puede circular. Es inaceptable que un argentino sienta miedo o atraviese situaciones desagradables por involucrarse en los temas de todos. 39 años pasaron desde 1983, pero en La Matanza es moneda corriente el ataque para intentar apagar voces disidentes, destruir carteles y materiales informativos. No pueden tolerarse más estas prácticas y los mecanismos impulsados para vulnerar la voluntad de la gente. Nada positivo puede esperarse si los ciudadanos más comprometidos con el bien común deben padecer insultos, presiones y hasta agresiones físicas”. 

“La Matanza no es del Frente de Todos, es de cada vecino. Lo que sí es del Frente de Todos es la gestión municipal a lo largo de todo este tiempo. Una gestión que solo trajo decadencia para todos y beneficios para unos pocos. Seguramente, entre esos pocos está el cobarde agresor de hoy. Ahora vamos a radicar la denuncia penal correspondiente”.  

Finocchiaro concluyó: “Vamos a volver, a esa esquina y a todas las demás. Vamos a seguir multiplicando el mensaje de que se puede vivir mejor. Nos van a ver en la vía pública cada día hasta que podamos terminar, de una vez por todas, con este modo de concebir la política que no es otra cosa que un apriete autoritario y  violento”.