DOMINGO

Lo que dejó el Tedeum patrio de la capital bonaerense: entre las elecciones y el estado inteligente

Domingo, 25 de Mayo del 2025 - 17:16 hs.

El Arzobispo de La Plata, Gustavo Carrara presidió este domingo 25 de mayo el tradicional Tedeum en la Catedral platense por el 215° aniversario del primer gobierno patrio. Estuvo acompañado por el Obispo Auxiliar, Jorge González; el párroco del templo, Hernán Remundini y el Presbítero Santiago Rocca.

Participaron de la ceremonia, representantes de otros cultos y confesiones religiosas; el Gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Áxel Kicillof; la Vicegobernadora, Verónica Magario; la Jefa de Asesores del Gobernador, Cristina Álvarez Rodríguez; el Intendente de la ciudad, Julio Alak; el Jefe Comunal de Berisso, Fabián Cagliardi; entre otras autoridades provinciales y municipales; fieles de diversas comunidades.

En sus palabras, Monseñor Carrara agradeció a Dios Creador “por habernos regalado la patria que habitamos. Y este año lo hacemos en el Jubileo de la Esperanza”.

Aclaró asimismo que “la dignidad que tenemos nos da derecho a ser felices, o a intentar al menos ser felices. Ahora bien, los seres humanos no podemos alcanzar la felicidad solos. Somos seres sociales, necesitamos de vínculos, de relaciones. Existir es convivir. Necesitamos de la comunicación y de la comunión, nuestro corazón anhela la comunidad humana”.

Y señaló: “La primera comunidad humana es la familia. Hasta el mismo Dios quiso nacer en una familia hace 2025 años. Es verdad que no existe la familia perfecta. Cada familia tiene sus problemas y también sus grandes alegrías. En ella cada persona es valiosa porque es distinta a las demás, cada uno aporta lo suyo. Y ante las dificultades es imprescindible el diálogo y el perdón”.

“Además de la familia -dijo- aparecen otras formas históricas y concretas de comunidad humana. Son núcleos humanos que se reúnen en la búsqueda de un bien común particular. Son las llamadas asociaciones intermedias, y pueden ser de índole religiosa, cultural, política, económica, etc. Cada uno contribuye según su fin al cuidado de la dignidad de la persona humana y la búsqueda de la felicidad”.

Expresó asimismo que “si el servicio es fuente de alegría, el pertenecer a una comunidad también lo es. Por eso es necesario apostar por las acciones que fortalecen la vida comunitaria, que integran a las personas en una comunidad, y de este modo seguir organizando la esperanza”.

En tanto, se refirió a que “una presencia inteligente del Estado debe velar por la dignidad de las personas, la igualdad de todos los ciudadanos, y ayudar a su participación plena en la vida de la comunidad”. “Es necesario apelar a un proyecto que ponga en el centro la dignidad de cada persona humana y el bien común, y que conciba la economía como la adecuada administración de nuestra casa común, evitando endiosar al dinero”, enfatizó.

Finalmente, recordó que “este año se cumplen cuarenta años de aquellas primeras elecciones legislativas del retorno de la democracia. Y este año volvemos a votar. Siempre un acto eleccionario es un valioso momento democrático, por eso es muy importante que todos podamos participar, y que luego nos sintamos realmente interpretados y representados por las leyes que se voten".