Con 125 votos afirmativos, 112 negativos y tres abstenciones, la modificación de la Ley de Alquileres logró media sanción en la Cámara de Diputados de la Nación. Aunque aún falta la definición en el Senado, todo indicaría que los cambios que buscan que los contratos sean a dos años y con actualizaciones cuatrimestrales, serían un hecho.
En este marco, la diputada del Frente de Todos, Mónica Macha, habló con AM530 y analizó lo ocurrido en la cámara baja: “Es un retroceso enorme para los inquilinos e inquilinas. Los cambios cada dos años generan un trastorno que es evidente para quienes alquilan, sumado a la angustia de saber que un contrato se vence y que tienen que rearmar en dónde se va a vivir y qué es lo que se va a poder alquilar”.
En la misma línea, la legisladora nacional consideró que, en la actualidad, “el problema no es tanto la oferta, sino la especulación del mercado. Es necesario desarmar algunos discursos que proponen una legislación que favorece a los inversores inmobiliarios”.
“Tenemos una ley con problemas de implementación. Es una ley muy fuertemente amenazada por el mercado inmobiliario. Hay una especulación inmobiliaria muy fuerte para no poner las viviendas en alquiler”, destacó.
En este marco, Macha consideró que sería adecuado “discutir cuál es el rol del Estado para acompañar o equilibrar la desigualdad de poder que existe entre quien alquila y el mercado inmobiliario”.
Además, recordó cuáles fueron los orígenes de la normativa vigente: “Esta es una ley que construimos desde lo que en ese momento era el Frente Para la Victoria con inquilinos agrupados y organizaciones vinculadas al hábitat popular. La ley tiene en su texto los puntos más importantes que plantearon los inquilinos”.
Sin embargo, reconoció que “la ley tiene un problema de aplicación. Cuando logramos sancionar la ley cumplimos un ciclo. Pero el cumplimiento es una acción del Poder Ejecutivo Nacional; eso es lo que nos falta”.
“Ahora quieren introducir la posibilidad de aumentar cada cuatro meses. En la ley vigente tenemos un aumento anual. Con estas modificaciones los inquilinos quedarían más desprotegidos”, reflexionó.
Y concluyó: “Los inquilinos definieron la ley y las empresas inmobiliarias fueron a querer derogarla. Está muy claro quien defiende y quien ataca esta ley”. [El Teclado]